"El día que se perdió la cordura" de Javier Castillo

RESUMEN DE LA EDITORIAL: Centro de Boston, 24 de diciembre, un hombre camina desnudo con la cabeza decapitada de una joven. El doctor Jenkins, director del centro psiquiátrico de la ciudad, y Stella Hyden, agente de perfiles del FBI, se adentrarán en una investigación que pondrá en juego sus vidas, su concepción de la cordura y que los llevará hasta unos sucesos fortuitos ocurridos en el misterioso pueblo de Salt Lake diecisiete años atrás.

El título le viene como anillo al dedo: desde luego que se perdió la cordura uffffffffffff.

Como he leído en alguna crítica, lo importante de este libro y de esta trama no son los personajes, sino que se perdió la cordura totalmente.

Un thriller en toda regla, macabro, capítulos cortos pasando de unos personajes a otros, rápido y que no puedes dejar de leer para saber cómo esos personajes se entrelazan y cómo acaba todo. Los capítulos tan cortos hacen que la lectura sea muy rápida y te termines el libro en dos días.

Ha habido momentos en que me ha dado miedo, una historia bastante impactante de asesinatos que me ha hecho temblar, pero a la vez adictiva, y no podía parar. Como cuando estás viendo una peli de terror, pones tu mano en la cara para tapar los ojos y no ver las escenas porque el pánico se apodera de ti, pero dejas los dedos abiertos para ver un poquito entre ellos y así no perderte nada. Más o menos me ha pasado eso al leerla, me he asustado pero no podía para de leer.

La intriga y la trama está muy bien trazada, no sabes por dónde va a discurrir la historia, no sabes qué va a ser de los personajes, todo enlazado de una manera exquisita y asegurando la intriga hasta el final. Eso sí, cordura ninguna, una historia locamente macabra, inverosímil pero muy imaginativa.

El amor puede con todo, el amor mueve montañas como siempre se ha dicho, y por ello Jacob lucha para encontrar la verdad de una manera que me ha parecido sublime, entregando su vida a ello, y a los lectores nos ha tenido atrapados hasta el final.

Los primeros encuentros de Jacob con el Dr. Jenkins y Stella me han parecido sublimes.

He tenido un verdadero problema con el final, algo que me ha dejado con un mal sabor de boca, y es que ¡¡¡NO LO HE ENTENDIDO!!! No he entendido el final, no sé qué ha querido decir, tengo mil hipótesis y todas me parecen absurdas. Parece abierto a una segunda parte, es muy evidente, pero de todas formas no he entendido lo que ha querido decir el autor, o ¿es eso? El autor con ese final no quiere decir nada, lo deja todo demasiado en el aire para la imaginación del lector o para esa segunda parte.

Ruego que si alguien ve esta reseña, me saque de dudas y me explique qué pasa con ese final tan inesperado, al menos para mí, qué habéis entendido. No dejéis comentarios aquí para evitar “spoilerar”, podéis dejarme un mensaje en mi correo personal merfer65@hotmail.com …. ¡¡GRACIAS!!!

Es un libro que recomiendo a los amantes del terror y de los thrillers macabros, pero si hay una segunda parte, conmigo no cuentes, Javier Castillo, que tengo muchos libros por leer y éste está en la media del 6.