"Las hijas de la tierra" de Alaitz Leceaga

RESUMEN DE LA EDITORIAL: Año 1889, La Rioja. Hay quien dice que una maldición se ciñe sobre los viñedos, secos desde hace años, de la finca Las Urracas. Mientras las grandes bodegas de la región comienzan su edad dorada, Gloria -la joven hija del propietario- languidece en la vieja mansión familiar, viendo aproximarse otro otoño sin cosecha.

Sometida a la autoridad de una tía cruel y un padre ausente, Gloria verá cambiar su vida de un día para otro cuando tenga que ponerse al frente del negocio familiar. Será entonces cuando comience una larga batalla que la enfrentará a los bodegueros y caciques locales, que no conciben tener como rival a una mujer. Y menos a una que pone en duda sus viejos privilegios...

Con la ayuda de sus hermanas, Gloria luchará por recuperar el esplendor de sus viñedos, al tiempo que se adentra en los secretos que esconden las habitaciones cerradas y los campos muertos de Las Urracas. Bajo la sombra de una maldición que solo al final sabremos si es cierta, las mujeres de esta novela lucharán, sin miedo a nada ni a nadie, por el poder que les pertenece.

Segundo libro del reto anual QBV leído.

Me ha gustado muchísimo. QBV me llevó a este libro y a este Reto anual, y de nuevo muy agradecida a este club y a sus miembros que ya forman parte de mi círculo cercano de amigos.

Debo decir que por circunstancias personales me ha durado más de la cuenta, pero nada tiene que ver con la historia. Es más, por la historia en sí y lo que me atrapó, he podido retomar en su lectura y terminarlo rápido, en dos días.

No quería que acabara, aunque por el argumento sí, ya que quería dejar de ver sufrir a Gloria.

Historia de mujeres, con Gloria a la cabeza, fuerte mensaje feminista, mujeres llenas de esa valentía innata que muchas demostraron teniéndolo todo en contra en un mundo de hombres. Alabo esas agallas de la protagonista, de no achicarse ante los obstáculos y las amenazas.

Qué gusto desobedecer, qué fuerza te da no dejarte llevar por lo impuesto, por las normas, por el qué dirán. Esa desobediencia la encumbró y a mí me ha fascinado. Me he sorprendido muchas veces diciendo entre dientes “ole tú” cuando la leía enfrentarse a todos.

Personajes fuertes, tanto los buenos, como los menos buenos y como los terriblemente malos. Lo dicho, me ha encantado.

Magia en las letras de la autora. Por poner una pega, demasiado reiterativo en los atardeceres, en los amaneceres, decía siempre lo mismo.

Poder, riqueza, negocios, asesinatos, lucha, vides, amor y lealtad … y hermanas. He adorado a esas hermanas. Bravo por vosotras, gracias hermanas Beltrán-Velasco, me habéis sacado de mi letargo.

Un 9.