CLUB LECTURA CALLE VALLE: "Buitrera", de Manuel Moya

MEJOR CREERLO QUE NO IRLO A VER. 

RESUMEN EDITORIAL: Cinco jornaleros andaluces se preparan para iniciar el camino hacia la raya portuguesa, donde han sido contratados como carboneros, en un tiempo en que no es difícil ser confundidos con miembros del maquis. Un pajarero que tras haber descuidado su vida, quiere recuperarla, un capitán relegado a un despacho administrativo que trata de reivindicarse. Un territorio feraz habitado por pájaros donde la Naturaleza explota en cada colina, en cada arroyuelo. Una novela que narra los imponderables que el destino va colocando en cada recodo del camino, y la lucha del hombre por redimirse de todos los errores que acechan desde el pasado y que marcan inexorablemente el presente y el futuro. Una novela que es a la vez un road movie y que se mueve por los hilos del suspense"

En primer lugar, decir que  'Buitrera' fue novela ganadora del Ciudad de Estepona 2021

Nos reunimos en mi biblioteca en una nueva cita del Club de Lectura calle Valle, esta vez siendo José Ángel el moderador y el presentador del libro. 

1) Luisa

3) Elena

4) José Ángel ☆☆☆☆

5) Eugenia 

6) Carmen Ordóñez 

7) Lourdes

8) Ana

9) Manolo

10) Y yo

Un libro muy de aquí, rural y alrededor de nuestro pueblo, Fuenteheridos. 

Todo nos sonaba a cercano, a conocido y por ello, el libro resultaba entrañable, y su debate lleno de anécdotas que, José Ángel, buen conocedor de todo lo que a Fuenteheridos rodea, nos hizo una presentación y desglose del libro muy enriquecedor, con cosas que muchos desconocíamos a pesar de llevar en este pueblo más tiempo que él.

Moya retrata una España de posguerra, con esa manera de escribir casi poética, intimista, lenta, pausada, absorbente, recreándose en los sitios. Te engancha sin darte cuenta; vas leyendo y de pronto te encuentras en la mitad y te da pena que sólo te quede otra mitad. Para mí, su mejor libro. Para muchos de los que nos reunimos, también. 

Destacar la manera en la que está escrito, tal y como se hablaba en aquella época y también ahora por estas tierras: ya m`entiende, el favó, andá metía … quizás de Despeñaperros “parriba” cueste entenderlo, para nosotros, resulta muy nuestro.

Una obra que relata las vivencias de cinco jornaleros andaluces que se preparan para hacer el camino hacia La Raya portuguesa.

La historia, con sus personajes de la zona, es la que vivieron, según Manuel Moya, como lo hicieron antes sus padres y sus abuelos. Mi padre era de la misma generación de Fidel, el padre de Manuel, así que todo me sonaba a historia conocida.

Y de lejos, los buitres que recorren el mismo camino que los protagonistas, pero en tres horas, “desde las Peñas de Aroche hasta el levante de Zufre. Tres horas para las aves y tres días para los humanos a pie.”

En 'Buitrera' hay suspense, recuerdos, vivencias, un chico maltratado por la vida (un guiño claro a Octavio, hermano de Manuel Moya, al que yo conocí). 

Resaltar, no podía ser de otra forma, al protagonista, Wences, sospechoso para la gente por no haber sufrido lo que todos, culpable sin tener culpa. Así es la vida, en el siglo XV y en el siglo XXI

Moya conoce bien la zona y así es como la describe tan bien. Nos describe a la naturaleza en su aspecto más positivo, como la ven sus ojos. Al más fiel estilo del autor, nos lanza una indirecta subliminal: la amenaza del ser humano contra esa naturaleza

La portada de 'Buitrera' es el Fuenteheridos de 1905 

Moya vuelve a hacerle un nuevo homenaje a la tierra que le vio nacer, en la que vive, y con su escritura, forma una simbiosis única con el aire, el agua, los árboles, los barrancos y sobre todo con los hábitos de los habitantes de esos pueblos y aldeas.

Buitrera supone también una defensa de un lenguaje que poco a poco está quedando en desuso y que Moya recupera, acompañando el texto con un diccionario que hace de epílogo y que permite entender algunos diálogos, sobre todo los nombres de multitud de enseres que ya están en desuso.

Pero hay algunas palabras que no están en ese diccionario, tan auténticas y tan de aquí, las que hemos escuchado tantas veces a nuestros padres y abuelos, y algunas seguimos usándolas; por ello, quizás, es que no haya hecho falta describirlas: poquino, tenía latines, sorprendiíno, una mijina  …. me quedo con resabiíno (que no es de aquí)

Un pequeño resumen que me atrevo a copiar porque describe el argumento sin spoiler a la perfección: “En seis calurosos días de septiembre de 1948, un grupo de carboneros se pone en marcha hacia un lugar cercano a la raya portuguesa existente en el noroeste de Huelva, en donde han sido contratados para hacer una buena ciscada de la que poder extraer unas perras para seguir malviviendo o simplemente, comiendo, que con eso basta según qué lugares y tiempos. Y en la España de aquella época, a menos de una década de finalizada la guerra civil que dejó este país manga por hombro y en donde el hambre venía como de serie cuando uno nacía, cualquier tarea era buena por muy dura que fuera si con ella se podía calmar las ansias de llevarse a la boca cualquier cosa que pudiera masticarse”

Para nosotros, los que debatimos en este club, todo resultaba conocido y por ello, muy emotivo: Cayetano y sus frutas, el saure, la pará, las catorce curvas, fuente La rebaná, Villaonuba (donde nació y vivió mi padre), la cantera, el tiro pichón ….

Os dejo un par de frases que he recogido y que no quiero olvidarlas, me han resultado sencillamente preciosas y elocuentes:

**** “Más vale un mal zapatero en su oficio que un rey en ninguno”

**** “Qué cosa extraordinaria es el sueño, que por unas breves horas nos lleva lejos de la realidad y, de esta forma, hasta el preso tiene sus momentos de irrevocable libertad y el hombre libre puede ser invocado y reducido por las pesadillas” (doy fe de ello)

Y la canción de la página 166 que he cantado muchas veces siendo niña, “Se menean cuando paso …”

Cuando describen al libro como un “Road movie”, me da coraje, este anglicismo no le pega nada a Manuel Moya, por muy acertada que sea la definición.

“Y por último y más importante, esta novela de Moya, de lo único que habla es de la condición humana” …. ¡¡¡ESO ES!!!

“Si me faltaras, no voy a morirme. Si he de morir, quiero que sea contigo”. Pablo Milanés

Que buena tarde, chicos, qué buen club … una lástima que durara tan poco.